Con el beneficio de la retrospectiva, el escritor de titulares del Evening Standard que soñó con ‘Arsène Who?’ titular en septiembre de 1996 debe sentirse bastante tonto ahora.
Puede haber pocos entrenadores de clubes de fútbol en cualquier parte del mundo que estén tan identificados con su equipo y su estilo de juego como Arsène Wenger del Arsenal. En una profesión en la que permanecer en un puesto durante más de dos años debería calificarte para un partido testimonial, el cortés francés lleva casi 13 años en el Arsenal. En cualquier otro país, que no tenga a Sir Alex Ferguson, sería, con mucho, el entrenador con más años de servicio.
Durante ese tiempo, el Arsenal ha ganado la Premier League en tres ocasiones y la Copa FA en cuatro ocasiones, además de llegar dos veces a la final de la Liga de Campeones y ser subcampeón de la Copa de la UEFA. Y, durante todo su paso por el club del norte de Londres, Wenger ha producido equipos que juegan al fútbol con un estilo real, a veces con una belleza impresionante.
Arsène Wenger pertenece a esa tradición de entrenadores que nunca fueron grandes jugadores y, por lo tanto, comenzaron a entrenar relativamente temprano en sus vidas. Con títulos tanto en Ingeniería como en Economía, y con fluidez en español y alemán, así como en francés e inglés, la educación era una prioridad para él cuando era joven y no se convirtió en un profesional con RC Strasbourg, su ciudad natal. hasta 1978, cuando tenía 29 años. Solo jugó para el primer equipo en doce ocasiones, en su temporada ganadora del título de 1978/79, incluido un partido en la Copa de la UEFA.
El primer puesto de dirección de Wenger fue con el Nancy, cuando tenía 34 años, y siguió este período relativamente infructuoso al unirse al AS Monaco, irónicamente, el equipo contra el que debutó en el primer equipo con el Estrasburgo, en 1987. Fue aquí donde su carrera realmente comenzó. florecer: ganó la liga francesa en su primera temporada (1988) y la copa en 1991. También llevó a jugadores del calibre de Glenn Hoddle, Jurgen Klinsmann y George Weah a jugar en el Principado. Sin embargo, siempre queriendo ampliar su educación y sus horizontes, pasó a la J League japonesa para administrar Grampus Eight durante un período de 18 meses que trajo la Copa del Emperador al club. En 1995, se convirtió en el primer gerente extranjero en recibir el Trofeo Gerente del Año.
Tan pronto como se unió al Arsenal, Arsène Wenger se dispuso a transformar la cara, no solo del club de Highbury, sino, indirectamente, de todo el fútbol inglés. Al transformar completamente los métodos de entrenamiento e introducir requisitos dietéticos totalmente nuevos, además de utilizar una variedad de entrenadores y expertos sin precedentes en el fútbol inglés en ese momento, los clubes de todo el país comenzaron a reevaluar sus estructuras. Ayudó a su causa, no hace falta decirlo, cuando el Arsenal ganó el doblete de la Liga y la Copa FA en solo su segunda temporada a cargo.
Gradualmente, Wenger pudo cambiar lo que había sido un Arsenal predominantemente cauteloso en una fuerza de ataque vibrante, sin perder la capacidad de defender cuando era necesario. El mayor logro de su carrera en la Premier League, y uno que siempre será considerado como una de las mejores hazañas de la historia, fue pasar toda la campaña 2003/04 sin sufrir una sola derrota.
La clave de todo el éxito del Arsenal con Wenger ha sido su talento para traer jugadores jóvenes al primer equipo y fichar a jugadores relativamente desconocidos y convertirlos en superestrellas mundiales. Patrick Viera, Nicolas Anelka y Emmanuel Adebayor se transformaron en el Arsenal. ¡Jugadores como Anelka fueron comprados por £ 500,000 y luego vendidos por más de £ 22 millones!
La reciente lesión del delantero Robin Van Persie, que anteriormente había tenido un gran éxito esta temporada, ha hecho que el entrenador del Arsenal tenga la responsabilidad de encontrar un jugador similar durante la ventana de transferencia de enero. Para los de afuera, parece como si el período comparativamente largo desde el último trofeo del equipo, la Copa FA en 2005, tal vez esté comenzando a ejercer presión, en gran parte autoimpuesta, sobre el entrenador. Famoso por no haber visto incidentes controvertidos que involucraran a sus jugadores, su reciente estallido inusual en una conferencia de prensa cuando se le preguntó sobre el estado físico de Theo Walcott fue seguido de algunos comentarios extraños sobre Didier Drogba que no estaba haciendo mucho en el partido de liga en el que dominó por completo al Arsenal. defensa. Finalmente, tras la derrota en los cuartos de final de la Copa de la Liga ante el Manchester City, Wenger se fue por el túnel de Eastlands sin estrechar la mano de Mark Hughes tras una pequeña ‘pelea’ entre ambos durante el partido.
A pesar de esta actitud, a veces poco galante, Arsène Wenger sigue produciendo equipos de fútbol que pueden deleitar al espectador neutral por su pase, movimiento y fluidez. Arsène Wenger, OBE y Freeman del distrito de Islington, que ya es el entrenador con más años de servicio en el Arsenal, seguramente traerá uno o dos trofeos al norte de Londres en un futuro cercano.